Chic = Sofisticación. ¿Hay más qué decir?
Mucho se ha rajado sobre que la música disco, en su expresión más comercial y reductiva, tenía como rasgos definitorios letras anodinas o elementalmente sexualizadas, dedicadas únicamente a aprenderse uno o dos pasitos de baile, ritmos que se repetían en un espacio de tiempo que no dejaba que uno respire y experimentación sónica más parecida a una canción infantil que otra cosa. Déjenme resaltar que esta descripción se puede en realidad, aplicar a todo género de música popular una vez que se encuentra una fórmula facilista para complacer a las masas. Y es que el gran pecado de la música disco en los 70's fue volverse más masivo que el rock lo cual produjo un colapso en las mentes de muchos oyentes y músicos que terminaron por extinguir la moda de la manera más autoritaria y escandalosamente machista. Ahora sí, en cuanto a Chic, aquí viene lo bueno, pues la carrera de esta banda se funda en las raíces jazz de las primeras experiencias musicales de sus integrantes y el deseo de sacar lo máximo al sonido producido básicamente por un bajo, una que otra guitarra rítmica, y voces femeninas nada grandiosas ni parecidas a las de ninguna 'diva' del canto discotequeado. Su influencia es inmensa, en buena parte, irónicamente, en el rock/pop/new wave ochentero y los ahora reconocidos clásicos del sonido Chic siguen sonando tan elegantes y arrasadores como cuando recién salieron al mercado. "I Want Your Love" una balada disco, si se quiere, con campanadas que recuerdan a la navidad un poco, pero dan un matiz de sobriedad y distinción extraño y único en la historia del género, fue un disco de oro en 1979, otro número inolvidable en la discografía del grupo que apostó por un cambio de timón luego del monstruo juerguero "Le Freak", (necesito decir futuro post?) #1 en meses previos.
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